Os podría decir quién es, pero me quedaría corta.
Os podría decir que él apostó por mí antes de que nadie lo hiciera,
que me miró cómplice y me dio la mano cuando estaba en el suelo,
que gracias a él me subí a un escenario y perdí el miedo.
Os podría decir que gracias a él conocí Barcelona como nunca antes,
que le bastó una tarde en el Retiro para que volviera a tener esperanza en la raza humana,
que tiene un alma
totalmente
indescriptible,
que su corazón no parece de este mundo y que su niñez adulta
podría conquistar a cualquiera que osase colarse en ella,
y aún así,
aún así me quedaría
corta.
Podría pediros ayuda, pero creo que no es la palabra
adecuada.
Escuchadlo, sentidlo, dejaos llevar por su voz y sus manos
sobre seis cuerdas.
Su nombre es Vico y le debo más de lo que nadie se imagina,
de lo que él se imagina.
de lo que él se imagina.
En
estos momentos está intentando sacar a la luz su próximo disco y para ello necesita
vuestra colaboración, esa sí es la palabra, pues toda colaboración lleva
consigo una recompensa, aunque él os lo sabe explicar mejor:
(Si pincháis AQUÍ sabréis de lo que hablo)
Da igual de dónde seas o qué edad tengas, vuestra recompensa
llegará a su destino.
Por mi parte sólo puedo dároslo a conocer aprovechando las
tantísimas personas que increíblemente leen este blog, ya sabéis que jamás he subido una
entrada parecida a esta, y precisamente por eso, espero que entendáis lo
importante que es para mí que Vico consiga este maravilloso sueño.
Y sí, perdón por el “spam” que esto supone,
pero creo que es necesario para el alma de uno mismo ayudar a las personas en las que creemos, y yo creo
en él. Ojalá vosotros también.
Si uno sólo de los que estáis leyendo esto se ve atravesado por
su talento y queda impregnado de él, habrá merecido la pena.
Mil gracias por leer, por estar ahí, por ser así.
Mónica Gae.