viernes, 5 de febrero de 2016

Maldita seas.


Maldita seas.

Sí, maldita seas
tú y tus ojos.

Yo y mi incapacidad
para dejar de mirarte.

Maldita sea la noche
en que olvidé hablar
por tenerte delante,
pero joder,

¿qué se supone que se le dice
a la chica con la que todos quieren bailar?




Pero qué forma de moverte.
Pero qué forma de no mirarme.

Pero qué formas
tan absurdas
de perder
las mías.

No sé si te lo han dicho antes
pero parece que tengas en la piel cuchillos
y me encantaría morir desangrada
desde que sólo pienso en rozarte.

Que ojalá seas de ese tipo de chicas
que se enamora de una sonrisa.

Que tengo un ejército preparado
y una amenaza de vida:

O dejas de callar así
o voy a tener que enamorarme.


Mónica Gae.