domingo, 29 de abril de 2012

Delirios de tu boca justo antes de dormir.



Hoy, como cada noche, he mirado el móvil justo antes de meterme a la cama. Me he quedado en pause por un momento y he tenido que encender otra vez el portátil. Tenía que escribir esto.

Echo de menos tener un whatsapp tuyo diciéndome lo mucho que te encantaría abrazarme hasta que sonara el despertador. Echo de menos hacerme la dura y que me ablandaras con sólo un beso. Echo de menos reírme de ti cuando hacías el tonto, que te rieras tu de mi cuando lo hiciera yo y llamarte patoso.

Últimamente me olvido de todo menos de pensarte.

Creo que quiero aislarme de momentos como este, de pensar en ti teniendo una hoja en blanco cerca. Escribir todo lo que llevo dentro y no poder borrarlo. Escupir como si fuera fuego que te quiero, que aun te quiero. ¿Sabes? Creo que lo que más echo de menos, ante todo y con infinita diferencia, es despertarme en mitad de la noche y darte un beso con cuidado. Poner mi mano sobre tu pecho y sentir que sigues respirando. Acariciarte lentamente captando cada detalle de tu cuerpo y volver quedarme dormida escuchando los latidos de tu corazón.

Esta noche me haría falta un mensaje tuyo diciéndome que me quieres, que aun me quieres. Que me echas de menos o, simplemente, que estas pensando en mi. Aunque solo sea un poco, a lo lejos. Muy, muy poco.

...me bastaría.

(Aunque supongo que sólo es la falta de sueño, no me hagas demasiado caso. Buenas noches...)



Mónica Gae

1 comentario:

  1. Muchas veces, las cosas más simples, como un mensaje antes de dormir, una llamada, son las cosas que nos hacen más felices, que nos recuerdan que hay alguien al otro lado que se acuerda de nosotros.

    ¿Quién no se ha despertado a media noche y se ha quedado mirando a quien tiene a su lado? O incluso, ha llegado más tarde de la cuenta y se ha quedado simplemente mirando en el quicio de la puerta mirando.

    A veces, con las cosas más simples, somos felices. Somos así.

    ResponderEliminar

Ballantines & Coca-cola